Sábado, 7 de Septiembre de 2024

Despidieron a Nora Cortiñas en la Mansión Seré, el ex centro clandestino de Castelar

Nora Cortiñas, conocida como "la madre de todas las luchas", falleció este jueves por la tarde a los 94 años. Fue despedida en el partido de Morón por las Madres de Plaza de Mayo, entre ellas Taty Almeida y Adelina Lara Molina.

01-06-2024



Figuras de organismos de Derechos Humanos, funcionarios y la comunidad en general se reunieron este viernes para despedir a Nora Cortiñas, cofundadora de Madres de Plaza de Mayo, e infatigable defensora de la "Verdad, la Memoria y la Justicia"; fue velada en el ex Centro Clandestino de Detención, la Mansión Seré, ubicada en el partido de Morón.

Taty Almeida, integrante de Madres de Plaza de Mayo, estuvo presente en el Espacio de la Memoria, un excentro clandestino de detención y tortura de la última dictadura militar. Funcionarios locales, incluido el intendente del Municipio de Morón, Lucas Ghi, también acudieron para rendir homenaje a "la madre de todas las luchas".

Adelina Lara Molina, también Madre de Plaza de Mayo de la Línea Fundadora y hermana de Carlos Alberto Rizzo Molina, secuestrado el 13 de diciembre de 1977, asistió para dar el último adiós a Cortiñas. "Nora estaba en todas partes. Había quedado pequeñita, pero fue incansable", destacó.

En este contexto, Molina recordó a su hermano, quien trabajaba como personal civil en la Escuela de Mecánica de la Armada al momento de su desaparición. Este lugar funcionó como el mayor centro clandestino de detención, tortura y exterminio durante la última dictadura militar.

"Por ver lo que vio, lo siguieron durante 15 días. Así, el 13 de diciembre a las 8:15 de la mañana, lo buscaron y se lo llevaron. Desde ese día, nunca más supe de él. Mi hermano vivía en Álvarez Thomas y Estomba, nadie me dijo qué le pasó, nunca supe qué hicieron con él", lamentó Molina.

En tanto, también fue recordada en la cancha de Deportivo Morón, cuando previo al partido que disputara el domingo hubo un minuto para resaltar desde la voz del estadio: "Psicóloga social, docente universitaria y vecina de Castelar, su vida dio un giro en 1977 cuando su hijo fue secuestrado en la estación de trenes.


Sospechando que había secuestrados en la Mansión Seré fue hasta allá para intentar ver qué había allí, y al ser interceptada por los que custodiaban el lugar dijo estar averiguando para alquilarla y elevó la voz para ser escuchada adentro para que los secuestrados supieran que alguien los buscaba, algo que años después supo que efectivamente habían logrado escucharla.


Fue, hasta sus últimos días, la mayor referente de Madres de Plaza de Mayo línea Fundadora.


Un metro cincuenta de mucha valentía, Cálida, luchadora incansable. Nos dejó con 94 pero sólo físicamente, porque Norita, por siempre, será eterna".

Regresar