El Gobernador de la provincia y ex candidato presidencial del oficialismo, Daniel Scioli, tendrá su primer encuentro personal con María Eugenia Vidal, que viene de derrotar a Aníbal Fernández el 25 de octubre y trabaja en la transición desde hace casi un mes. La cumbre será sumamente importante porque, en medio de la campaña, no fue posible definir algunos puntos clave, entre ellos los matices del presupuesto y la ley impositiva.
La propia Vidal subió la polémica el lunes, junto a Mauricio Macri, cuando habló de preocupación en el sector de los docentes y empleados públicos por el pago de salarios, dando a entender que había problemas financieros para abonarlos. El rojo en las cuentas públicas, o sea el déficit fiscal, y la falta de fondos propios son otras dos preocupaciones.
Ese representa un punto de discrepancia importante. Mientras la ministra de Economía actual, Silvina Batakis, afirma que el pasivo no es tal, su sucesor, Hernán Lacunza, hace un diagnóstico distinto.
Como están dadas las cosas, la única área en que la transición parece sencilla es seguridad, algo importante puesta la importancia de esa cartera, aunque definitivamente no suficiente. El futuro ministro de la dependencia, Cristian Ritondo, elogió la labor del actual responsable, Alejandro Granados, y anticipó que profundizarán las Policías Comunales.
Fuera de eso, no hay datos demasiado alentadores. Ritondo y Lacunza, junto con Federico Salvai y Edgardo Cenzón, acompañarán a Vidal, al tiempo que Alberto Pérez, Jefe de Gabinete bonaerense, estará con Scioli.
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