El ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, puso un poco de picante a la negociación luego de salir a declarar que "el incremento salarial permitió mantener el poder adquisitivo según los indicadores" de este año, contra la premisa que manejan los sindicatos convocados a la propia mesa, tanto docentes como los estatales.
"En el peor de los casos, estamos un punto arriba", manifestó el titular de la cartera laboral.
"La inflación no se ha comido el aumento ni ha hecho perder poder adquisitivo", negó Cuartango una vez más.
Pero esa no es la percepción dominante en las filas gremiales. Por ejemplo, el líder de los maestros bonaerenses, Roberto Baradel, alega que sus conducidos tuvieron una "pérdida del poder adquisitivo superior al 30 por ciento" y que por esa razón exigen un aumento salarial ahora, y no a comienzos del año próximo, mientras su par en ATE provincial, Oscar De Isasi, asegura que la caída real en sus ingresos data de varios años atrás.
Cabe recordar que la paritaria arrancó durante la semana pasada, con sendos encuentros los días martes y miércoles. El primero fue con el Frente Gremial Docente y el segundo con los sindicatos ATE, UPCN y el conjunto de gremios enrolados en FEGEPPBA. En ambos casos sirvió para establecer algunas de las pautas clave e introducción para lo que viene.
La ronda pasó a cuarto intermedio hasta el jueves 18, cuando Cuartango vuelva a llamarlos para retomar las conversaciones.
Provincia no hizo ni dio adelanto alguno sobre la oferta salarial que realizará. Pero sí quedó claro que cabe la posibilidad de acordar un incremento para el mes de enero, aunque no hay porcentajes aproximados y están descartados los otros reclamos de la administración pública, que incluía mejoras salariales para este año y un bono adicional en diciembre, antes de las festividades.
Por desentendimientos como ese, los estatales de ATE hará una nueva medida de fuerza esta semana. Pararán el día jueves cuando -en sintonía con la huelga y movilización propuestas por la CTA Autónoma de Pablo Micheli- acompañen la marcha por el centro porteño junto a otros sindicatos ceteístas, como los médicos de la CICOP y los judiciales de la AJB.
Los profesionales de la salud también realizarán un cese de actividades, paralizando las actividades en los 78 hospitales públicos, por una serie de planteos que incluyen su reclamo de reabrir la paritaria y lograr un incremento antes de fin de año, dos posibilidades ya rechazadas tiempo atrás. Por su parte, los judiciales prefirieron no frenar la actividad en los tribunales a pesar de sus múltiples demandas, que abarcan -además de las anteriores- el pedido de la Porcentualidad Salarial.
El adelantamiento de la paritaria, desde esa perspectiva, tiene un sabor agridulce. Es reconocido como un salto cualitativo pero no sirvió para aplacar el descontento ni desactivar algunas de las medidas de protesta.
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